FISICA Y QUIMICA
1992

- 01. Y NOS DIERON LAS DIEZ
- 02. CONDUCTORES SUICIDAS
- 03. YO QUIERO SER UNA CHICA ALMODÓVAR
- 04. A LA ORILLA DE LA CHIMENEA
- 05. TODOS MENOS TÚ
- 06. LA DEL PIRATA COJO
- 07. LA CANCION DE LAS NOCHES PERDIDAS
- 08. LOS CUENTOS QUE YO CUENTO
- 09. PEOR PARA EL SOL
- 10. AMOR SE LLAMA EL JUEGO
- 11. PASTILLAS PARA NO SOÑAR
1 Y NOS DIERON LAS DIEZ
Fue en un pueblo con mar una noche,
después de un concierto
Tú reinabas detrás de la barra
del único bar que vimos abierto
Cántame una canción al oído
y te pongo un cubata
Con una condición,
que me dejes abierto el balcón
de tus ojos de gata
Loco por conocer los secretos
de su dormitorio
esa noche canté al piano del amanecer
todo mi repertorio
Los clientes del bar,
uno a uno, se fueron marchando
Tú saliste a cerrar, yo me dije, cuidado chaval
te estás enamorando
Luego todo pasó de repente,
su dedo en mi espalda
dibujó un corazón y mi mano le correspondió
debajo de su falda
Caminito al hostal nos besamos
en cada farola
era un pueblo con mar,
yo quería dormir contigo
y tú no querías dormir sola
Y nos dieron las diez y las once
las doce y la una, y las dos y las tres
y desnudos al anochecer nos encontró la Luna
Nos dijimos adiós, ojalá
que volvamos a vernos
El verano acabó,
el otoño duró
lo que tarda en llegar el invierno
Y a tu pueblo el azar, otra vez,
el verano siguiente
Me llevó y al final del concierto
me puse a buscar
tu cara entre la gente
Y no hallé quien de ti me dijera
ni media palabra
parecía como si me quisiera el destino gastar
una broma macabra
No había nadie detrás de la barra
del otro verano
Y en lugar de tu bar,
me encontré una sucursal del banco
hispanoamericano
Tu memoria vengué, a pedradas
contra los cristales
Sé que no lo soñé,
protestaba mientras me esposaban
los municipales
En mi declaración alegué
que llevaba tres copas
Y empecé esta canción en el cuarto
donde aquella vez
te quitabas la ropa
Y nos dieron las diez y las once
las doce y la una, y las dos y las tres
Y desnudos al anochecer nos encontró la Luna
Y nos dieron las diez y las once
las doce y la una, y las dos y las tres
y desnudos al anochecer nos encontró la Luna