Sebastián Schneider

Vuelan
gaviotas sobre una playa distante,
la Luna llena absorbe
tus sentidos.
Caminas solo al filo de la noche,
que muy audaz te lleva
al infinito
y allí la encontras tal como se ha ido,
como una flor que espera
el rocío...
Su bello rostro siempre desvanece
al ver tus ojos siempre más que fríos

Contás
todas las vidas que no has vivido,
por no dejarla ser
como ella quiso,
y mil lamentos
no hacen ningun eco,
ya no hay nadie a quién pedir aliento.
Como escritor bloqueado
al acecho
de alguna idea que te dé
tu premio.
Abusador de copas y de botas,
sos un esclavo de cadenas rotas.

Sonrisas de otros
golpean en tu pecho,
muy arrepentido irás
tras ese amor que ya no espera
por tus caricias,
por tu lealtad...

Siempre para alguien somos nada

Mientras,
tus pies cansados buscan un respiro,
las estrellas te muestran
un designio,
y aprendés que todo ha concluído,
será la oscuridad tu abrigo y
vuelan gaviotas
sobre la playa distante,
y ya se acerca el fin del recorrido,
su voz, tan suave como días de antes,
susurra mis palabras a tu oído...