Flavia Palmiero

No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y me siento mejor.
No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y en seguida, me siento mejor.

Cuando llego al consultorio,
siempre hay otros nenitos.
Mientras habla con mi mami
yo le hago un dibujito.

Después me saco la ropa
y me subo a la balanza,
me hace algunas rosquillitas
al revisarme la panza.

No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y me siento mejor.
No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y en seguida, me siento mejor.

Si estoy mal de la garganta
tengo que abrir bien la boca.
No me hace doler nada
porque casi ni me toca.

Cuando ya nos despedimos
me regala un caramelo,
yo le doy un beso grande
y le digo que lo quiero.

No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y me siento mejor.
No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y en seguida, me siento mejor.

No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y me siento mejor.
No le tengo miedo al doctor,
no le tengo miedo al doctor,
cunado yo me enfermo me cura,
y en seguida, me siento mejor.

Así!