TAKI ONGOY CD II
1986
7 UN DULCE ALFARERO
Animosamente preparaba el barro,
amorosamente todos los colores.
Buscaba la forma con sus sabias manos,
amorosamente modelaba el barro.
Como un dios de greda
sentado en la piedra,
los ojos perdidos en el precocido.
Sólo entre los valles
él y las estrellas.
¡Qué cosa tan bella!
¡Qué cuestión del cielo!
Un hombre y la tierra:
un dulce alfarero.