Gabriela Carel

Trompa violeta del michay,
duende de los eneros
que anda juntando coplas por’ay
en su sombrero.
Si la luna le cuenta un cuento
lo desparrama soplando al viento.

Y cuando el duende trovador
corre por la meseta
saca chispa a las cuerdas, señor,
de fiesta en fiesta.
Si el lucero le canta arrullos
se vuelve cuna entre los yuyos.

Duende de los eneros, magia chubutana,
dame tu alegría, abre mi ventana.
Y llévame hasta el camino
que alumbre mi destino.

Sombra del bosque escondedor,
manto de los misterios,
cubre al duende en la siesta del sol
y a sus secretos.
Si el lahuán llora entre los cerros
convierte en lago su amor al cielo.

Fuerza del verde arrasador,
duende, verano y sueños.
Grita el chucao, baila el coirón,
cuecas sin tiempo.
Si en las piedras se escucha el río,
vendrá mi pueblo reflorecido.

Duende de los eneros, magia chubutana,
dame tu alegría, abre mi ventana.
Y llévame hasta el camino
que alumbre mi destino.