Felipe Santos

Ya nada te importa, ya nada es igual,
llevo cuatro meses sin poder cantar,
y es que aunque no llame, yo sí quiero verte,
no he podido yo sacarte de mi mente, yo no quiero perderte, oh.

Mientras me castigo con la soledad,
juegas a vestirte de felicidad,
y aunque a tus amigas no les digas nada,
tú también lo sabes, se ve en tu mirada, aunque sigas callada, oh.

Haré lo necesario para olvidarte
aunque me toque cambiar,
y no ser nunca más lo que fui,
ya no importa, igual no volverás.
Haré lo necesario para no pensarte,
la vida pasa y tú igual, y aunque voy a llorar,
poco a poco entenderé que nunca volverás,
poco a poco entenderé que nunca volverás.

Pido llorando al cielo un poco de razón,
pido que vuelvas con mi corazón,
entiende, si te ofendo, que no es mi intención.

Y es que lo que duele no es que te hayas ido,
más que no tenerte me duele tu olvido,
que sepas que te quiero, es lo único que pido.

Haré lo necesario para olvidarte
aunque me toque cambiar,
y no ser nunca más lo que fui,
ya no importa, igual no volverás.
Haré lo necesario para no pensarte,
la vida pasa y tú igual, y aunque voy a llorar,
poco a poco entenderé que nunca volverás,
poco a poco entenderé que nunca volverás.