Artista

Joaquín Sabina

ESTA BOCA ES MIA

1994

7 EL BLUES DE LO QUE PASA EN MI ESCALERA

El más capullo de mi clase (¡que elemento!)
llegó hasta el Parlamento
y, a sus cuarenta y tantos años,
un escañodecora, con su temo
azul de diputado del gobierno.

Da fe de que ha triunfado
su tripa, que ha engordado
desde el decía
que un ujier le llamó "su señoría"
y cambió a su mujer por una arpía
de pechos operados.

Y sin dejar de ser el mismo bruto
aquel que no sabía
ni dibujar la "o" con un canuto..

El superclase de mi clase (¡que pardillo!)
se pudre en el banquillo
y, a sus cuarenta y cinco abriles, matarile,
y a la cola del paro
por no haber pasado por el aro.

Vencido, calvo y tieso
se quedó en los huesos aquel día
que pilló a su mujer en plena orgía
con el miembro del miembro (¡qué ironía!)
más tonto del Congreso.

Y sin dejar de ser el mismo sabio
que para hacer poesía,
sólo tenía que mover los labios.

Y yo que no soy más
listo ni tonto que cualquiera,
a mis cuarenta y pocos tacos,
ya ves tú,
igual sigo de flaco
igual de calavera,
igual que cantes de loco
por cantar,
por cantar el blues
de lo que pasa en mi escalera.

La más maciza de mi clase (¡que cintura!)
cotiza la hermosura
y, a sus cuarenta y pico otoños,
hasta el moño del genio del marido,
huyó con otro menos aburrido.

Tanto ha prosperado que un Jaguar
ha estrenado el mismo día
en que la divorció de la utopía
un talón con seis ceros que le había
firmado un diputado.

Y sin dejar de ser la seductora
bruja que escondía
bajo la falda una calculadora.

Y yo, pobre mortal,
que no he gozado sus caderas,
a mis cuarenta y pocos tacos,
ya ves tú,
igual sigo de flaco
igual de calavera,
igual que antes de loco
por cantar,
por cantar el blues
de lo que pasa en mi escalera.

Por lo demás ni más
ni menos larga que cualquiera
a mis cuarenta y pocos tacos,
ya ves tú,
igual sigo de flaco,
igual de calavera,
igual que antes de loco
por cantar,
por cantar el blues
de lo que pasa en mi escalera,
por canta el twist
de las verdades verdaderas.

Por cantar... el bolero que canta mi portera.
Por cantar... una rumba gitana y canastera.
Por cantar... aquel tango de "el día que me quieras".
Por cantar... bajo la lluvia, sobre las aceras.
Por cantar... el rap del daño que hacen las banderas.
Por cantar... ballenatos que amasen a las fieras.
Por cantar... hasta que salga el sol por Antequera.
Por cantar... con mi primo Rosendo a su manera.
de vivir... siempre con gente, siempre salateras.

Por cantar... el rock and roll de las gasolineras.
Por cantar... un merengue pegado a una palmera.
Por cantar... camino de La Habana una habanera.
Por cantar... un mambo con smoking y chistera.

Por tocar... esa guitarra carabanchelera.
Por cantar... hoy en Pekín, mañana en Talavera.
Por cantar... el "bugui-bugui" de las carreteras.
Por cantar... allá en el rancho grande una ranchera.
Por cantar... como si el amanecer no existiera.

Por seguir... dando el cante hasta que me muera.
Por cantar... menos un "bakalao" lo que quieras.
Por silbar... al paso de una guapa peluquera.