Ulises Bueno

Cuando era pequeñito, me decía
que me fuera pa’ mi cuarto,
y mi madre llorando, me reñía
pa’ que le hiciera caso.

A la Virgen del Calvario le rezaba
por que esta guerra se acabara,
y por más que cerraba los ojos,
más le gritaba.

Ahora yo he crecido,
ya no quiero estar contigo,
ahora yo sólo te pido:

Que tomes tus cosa’ y te marches,
no permito que le pegue’ a mi madre,
márchate antes de que sea más tarde,
márchate y no me seas tan cobarde.
Que tomes tus cosa’ y te marches,
no permito que le pegue’ a mi madre.
Márchate, no te quiero ni ver,
que hay que ser muy poco hombre
pa’ pegarle a una mujer.

Ahora los recuerdos me atormentan,
tú le destrozaste la vida,
le faltaba maquillaje
para curar tantas heridas.

A la Virgen del Calvario le rezaba
pero tú nunca parabas,
y el alma se me cae por los suelos
cuando pienso en su cara.

Que tomes tus cosa’ y te marches,
no permito que le pegue’ a mi madre,
márchate antes de que sea más tarde,
márchate y no me seas tan cobarde.
Que tomes tus cosa’ y te marches,
no permito que le pegue’ a mi madre.
Márchate, no te quiero ni ver,
que hay que ser muy poco hombre
pa’ pegarle a una mujer.

Que tomes tus cosa’ y te marches,
no permito que le pegue’ a mi madre,
márchate antes de que sea más tarde,
márchate, no me seas tan cobarde.
Que tomes tus cosa’ y te marches,
no permito que le pegue’ a mi madre.
Márchate, no te quiero ni ver,
que hay que ser muy poco hombre
pa’ pegarle a una mujer.