Horacio Guarany

Como dos horneritos
pico y alas en vuelo
amasamos el barro
y el nidito llegó.

Con la puerta hacia el este
por los vientos dañinos
noche y día luchamos
y el nidito llegó

Y era tanta la dicha
y era la vida entera
y era la primavera
la canción y el amor

Y era esa luz del alma
que todo iluminaba
yo la amaba y me amaba
como jamás se amó

Pero un viento pampero
cobarde y sin motivo
destruyó nuestro nido,
nuestro nido de amor

Lo azotó entre las ramas,
castigó sus rosales,
y entre males y males
el nidito cayó

Yo junté los terrones
del barro que amasamos
y aunque mucho lloramos
el llanto terminó

Porque un nido que cae
por más que mi alma hiere
otros amaneceres
nacen en mi canción

Y hay que ser hornerito
hay que ser hornerito
que levanta su grito
desafiando al ciclón

Y hay que ser hornerito
levantar otro nido
que lo que se ha perdido
se pierde en el adiós.