Artista

Los Alonsitos

CHAMAMÉ CON LOS NOCHEROS

Con motivo de adelanto del show presentación de “Chamamé”, álbum que editaron junto a Los Nocheros, Los Alonsitos visitaron CM y cantaron para la gente.




“Estamos muy contentos de estar en el Canal de la Música, que es uno de los canales que más apoya al folclore”.

Los Alonsitos y Los Nocheros se conocieron en el Festival de Folklore de Cosquín en 1994. Dos años más tarde el mismo festival los volvía a encontrar y ambos grupos cerrarían una noche mágica. Desde allí, forjarían una estrecha amistad.

En 2015, el correntino Ariel Báez se comunicó con el salteño Kike Teruel y así Los Nocheros eran invitados a participar en la Fiesta Nacional del Chamamé, género del cual los salteños no tardaron en enamorarse.

El resultado de esa reunión es “Chamamé”, el primer álbum en conjunto de Los Alonsitos y Los Nocheros, editado el pasado 4 de diciembre.
La mayoría de las canciones que conforman el disco fueron interpretadas en la Fiesta del Chamamé.
“Un Abrazo a Corrientes”, tema popularizado por Los Fronterizos, es otro que se suma al repertorio y fue muy bien elegido, ya que fue escrito por salteños para correntinos.

LA ENTREVISTA

Durante la entrevista, uno de Los Alonsitos se animó a imitar a Rubén Ehizguirre, la voz más aguda de Los Nocheros. ¡Miralo acá!

LAS CANCIONES

¿Te acordás, mi chinita,
del Puente Pexoa, donde te besé?
Que extasiada en mis brazos,
tú me repetías: “No te olvidaré”.

Tardecitas de sol,
fiel testigo de amor,
en el Puente Pexoa,
querida del alma,
no existió el dolor.

¿Cómo estarán
en la ensenada del viejo ceibal,
los jazmineros y orquídeas en flor,
a quien cantó dulcemente el zorzal?

Quiero volver
a contemplarme en tus ojos camba,
y que me bese como te besé
bajo la sombra del Jacarandá.

Y ese largo camino
que hoy el destino de mi ti me alejó,
no podrá la distancia
vencer a las ansias de unirnos tú y yo.

Entonces cantaré,
tardecitas de sol,
a ese cielo divino, cielo correntino
que nos cobijó.

¿Cómo estarán
en la ensenada del viejo ceibal,
los jazmineros y orquídeas en flor,
a quien cantó dulcemente el zorzal?

Quiero volver
a contemplarme en tus ojos camba,
y que me bese como te besé
bajo la sombra del Jacarandá.

Cuando llueve en invierno,
sobre tu ausencia,
te busco en mis recuerdos,
llamándote.

Y me mojo en los soles
de tu presencia,
porque siempre hay enero
sobre tu piel.

Pañuelito verde de adiós,
del camalotal,
que se fue en un río de amor
a la soledad.
¿Dónde está tu risa feliz?
Dónde? Dónde fue
el verano rojo de sol
que doró tu piel?

Estás en el romance
del duraznero,
con un gusto silvestre
a luna y miel.

Y en la lágrima tibia,
vuelta en el verso
de un amor de verano
que se me fue.

Pañuelito verde de adiós,
del camalotal,
que se fue en un río de amor
a la soledad.
¿Dónde está tu risa feliz?
Dónde? Dónde fue
el verano rojo de sol
que doró tu piel?

Pañuelito verde de adiós,
del camalotal,
que se fue en un río de amor
a la soledad.
¿Dónde está tu risa feliz?
Dónde? Dónde fue
el verano rojo de sol
que doró tu piel?